¿Estás pensando en preparar tus herramientas de barbacoa y tu parrilla para el invierno? En el artículo de hoy de nuestro blog, te contamos todo lo que necesitas saber. Sí, por supuesto, todavía es temprano para guardar tu barbacoa, pero es mejor organizarse con anticipación para ciertas cosas. Una barbacoa al aire libre es un fiel compañero de verano. Es el centro de muchas noches al aire libre y representa una alternativa divertida y más saludable para las cenas familiares cotidianas. ¡Pero este invierno no dejes la parrilla afuera en el frío! Un mantenimiento adecuado puede prolongar la vida de tu inversión y asegurarte de que esté en excelentes condiciones una vez que regrese el clima cálido. Esto también se aplica a la forma de asegurar las herramientas de barbacoa. Así que echa un vistazo a estos simples pasos para proteger tu barbacoa y tus herramientas para asar.

¿Cómo puedo preparar mi barbacoa exterior para el invierno?

La mayoría de las barbacoas de jardín al aire libre constan de piezas móviles que se pueden desplazar fácilmente. Sin embargo, hay algunas parrillas que están instaladas de forma permanente, especialmente en patios amplios o en cocinas al aire libre. Algunas de estas barbacoas están conectadas a una línea de gas dedicada o están rodeadas de ladrillos o piedra. Si tienes una barbacoa exterior fija, aún puedes seguir estas sugerencias, excepto, por supuesto, las que implican mover la unidad.

Aquí están todos los consejos útiles para la conservación de tus parrillas

• Comienza con una limpieza profunda. Esto no solo ayuda a mantener la parrilla en buen estado, sino que también aleja a los insectos, roedores y otras criaturas no deseadas. Enciende todos los quemadores al máximo y déjalos funcionar con la tapa cerrada durante unos 15 minutos. Una vez que la parrilla esté completamente fría, frota cada parrilla minuciosamente con un cepillo para parrilla o con papel de aluminio arrugado.
• Si tienes un tanque de propano, apaga el gas, desenrosca el quemador, desconecta las mangueras y retira el tanque.
• Cubre los quemadores y otras partes de metal con aceite de cocina (el aerosol de cocina funciona muy bien), lo cual ayuda a repeler la humedad y prevenir la oxidación.
• Inspecciona los otros componentes internos y límpialos según sea necesario con un cepillo metálico.

¿Estás tratando de preparar tu ahumador para el invierno? Haz esto

Estos pasos también funcionan bien para los ahumadores de barbacoa. Si estás utilizando un sistema de pellets, asegúrate de retirarlo y limpiarlo a fondo. Sin importar si estás almacenando la parrilla en el interior o en el exterior, puedes hacerlo de manera segura protegiendo tu unidad.

• ¿Tu parrilla permanecerá afuera este invierno? Apaga el tanque de propano pero déjalo conectado, luego cubre toda la parrilla con una cubierta protectora.
• Para aquellos que almacenan la parrilla en el interior: deja el tanque afuera. Incluso las pequeñas fugas de gas representan un grave riesgo de explosión en espacios cerrados, incluyendo los garajes.
• Almacena los tanques desconectados en posición vertical al aire libre, lejos de las salidas de aire de la secadora, los hornos y áreas similares.
• No olvides mantener la barbacoa lejos de las áreas donde juegan los niños.
• Envuelve la unidad del quemador en plástico o en una bolsa de plástico. Esta es otra buena forma de mantener a los parásitos alejados de tu unidad.

Si los inviernos en tu zona son más suaves, almacenar la parrilla al aire libre en el interior puede que no sea tan importante. Sin embargo, conservar la parrilla en el interior puede darte una clara ventaja sobre los elementos en condiciones climáticas más duras. Incluso si no tienes espacio para llevar la barbacoa al interior, considera colocarla en un cobertizo o incluso debajo de un saliente de techo.