Las cocinas de exterior no son solo las que se encuentran en la terraza, en el jardín, en el patio o en espacios completamente abiertos. Una idea interesante es colocarlas en la veranda. Se trata de una tendencia que viene de los países anglosajones. De hecho, sabemos cuanto les gusta a los ingleses (pero también a los americanos) pasar el tiempo en este entorno, con una cocina equipada. Las cocinas de exterior de OF outdoorkitchens están pensadas también para las verandas, a las que aportarán encanto y convivencia. Aquí tienes algunas ideas para realizar tu espacio de confort a tu gusto.
Lo que no puede faltar en una cocina de exterior de veranda
La decoración de la cocina en la veranda deberá incluir, por supuesto, composiciones bien organizadas. No pueden faltar, por ejemplo, el horno, la placa de cocción y el fregadero. Las bases de apoyo serán entonces esenciales para guardar platos y vajilla. En cambio, puedes prescindir de los colgantes. Especialmente si estás pensando en amueblar una veranda con ventanas (tal vez con vistas al jardín o a la piscina), los colgantes son definitivamente descartables porque te resultaría difícil arreglarlos. Nevera y microondas te ayudarán a preparar los platos, pero el lavavajillas también podría ser muy útil, ya que acelera las operaciones de limpieza. Otro mueble indispensable para la veranda convertida en cocina es la mesa de comedor. Sin embargo, sería preferible elegir un modelo extensible o una mesa de jardín plegable, que resultan ideales para hacer sitio a nuevos huéspedes.
Por qué la cocina de exterior es perfecta para una veranda
En caso de que necesites amueblar una veranda abierta, las cocinas de exterior son la mejor solución ya que, como ya sabes, están especialmente diseñadas para resistir a la intemperie y también están disponible en versiones compactas, para espacios reducidos. El consejo de diseño adicional: un elemento interesante para amueblar el espacio como segundo salón es una mesa de café con sillones, que puedes utilizar para relajarte después de cenar. Y por supuesto, no podrás dejar de lado la barbacoa, ¡para una parrillada con amigos! A este respecto, te relevamos una curiosidad: ¿sabías que varias encuestas realizadas por agencias inmobiliarias han revelado que el 82% de los propietarios de casas están más interesados en invertir en locales al aire libre que antes de la pandemia? En resumen, lo que antes se consideraba sólo una agradable comodidad, ahora se ha convertido en una prioridad para muchos.
Elige con cuidado el diseño de tu cocina de exterior
El espacio en el que trabajas será el que dicte “las reglas” para el diseño de tu cocina de exterior, incluso en una veranda. Por supuesto, si sueñas con cocinas en forma de L con barra (lo hemos visto también en otros artículos de nuestro blog) te habrás dado cuenta de que son perfectas para los patios más grandes en los que planeas entretener a tus huéspedes con frecuencia, pero un simple conjunto de uno o dos muebles con una parrilla puede ser igualmente funcional en un espacio más pequeño como pueden ser precisamente las verandas. A continuación, recuerda planificar adecuadamente los servicios públicos como gas, electricidad y agua. Una cocina típica tiene cuatro zonas, que podríamos identificar con cuatro adjetivos:
- Una zona caliente, para cocinar;
- Una zona seca, para preparar los platos;
- Una zona húmeda, para el fregadero y donde están los grifos;
- Una zona fría, para refrigeración y hielo.
Si el espacio es limitado, puedes prescindir de las dos últimas zonas. En este caso, para utilizar la nevera y el fregadero, puedes colocar tu espacio de cocción al aire libre cerca de tu cocina interior.