Crear un espacio exterior sostenible no es solo una elección ética, sino también una oportunidad para vivir en armonía con la naturaleza y aprovechar al máximo cada rincón de tu hogar. En este sentido, añadir una cocina exterior puede transformar el jardín, la terraza o el patio en un lugar acogedor, ideal para pasar días enteros con amigos o disfrutar de almuerzos y cenas familiares, cocinando al aire libre mientras se mantiene siempre un enfoque respetuoso con el medio ambiente. En este artículo, exploraremos cómo diseñar un entorno exterior sostenible y cómo integrar en este espacio una cocina exterior que sea no solo funcional, sino también sostenible.
Cómo diseñar un espacio exterior sostenible: de la planificación a la integración de la cocina exterior
Antes de comenzar el proceso de diseño, o precisamente para iniciarlo, un espacio exterior sostenible requiere una planificación cuidadosa, que incluye:
- evaluar el espacio, prestando especial atención a la exposición, para determinar la mejor orientación para la cocina y las áreas de descanso y reducir el uso de iluminación artificial;
- analizar el terreno para prevenir el estancamiento de agua causado por pavimentos inadecuados;
- elegir materiales sostenibles, naturales y duraderos, como acero inoxidable, madera certificada FSC y piedras naturales;
- integrar árboles y arbustos, preferiblemente especies autóctonas, que requieren menos agua y mantenimiento y pueden proporcionar sombra natural, reduciendo la necesidad de estructuras artificiales.
Solo cuando la planificación de un espacio exterior sostenible esté clara, se podrá proceder a buscar muebles y decoraciones que se integren perfectamente con el entorno definido. Para mantener la sostenibilidad, se deben elegir muebles hechos con materiales reciclados, cojines y revestimientos en telas naturales, iluminación LED y una cocina exterior sostenible, incluso en su uso.
Cómo diseñar una cocina exterior sostenible
Diseñar una cocina exterior funcional sin renunciar a la sostenibilidad no solo es posible, sino necesario hoy en día. Sin embargo, es esencial entender que cuando se habla de una cocina exterior sostenible, no se refiere únicamente a su construcción, que implica prestar especial atención a factores como la elección de materiales ecológicos y electrodomésticos de bajo consumo energético, sino también, y especialmente, a su uso posterior. Además de preferir materiales como el acero inoxidable, la madera certificada FSC y las piedras naturales, y prestar atención al consumo energético de los electrodomésticos elegidos, una cocina exterior es verdaderamente sostenible si se basa en la gestión adecuada de recursos como:
- el agua, integrando un sistema de recolección de agua de lluvia para el riego de plantas y utilizando grifos de bajo caudal para reducir el consumo;
- la energía, instalando paneles solares para alimentar luces, electrodomésticos o sistemas de calefacción;
- los residuos, incluyendo espacios y compartimentos dedicados para la separación de residuos.
Además, el uso del espacio exterior y de la cocina debe seguir siendo sostenible con el paso del tiempo. Esto implica comprar exclusivamente detergentes ecológicos y fertilizantes naturales para la limpieza de la cocina y el mantenimiento del jardín, aprovechar al máximo la luz natural, reducir el desperdicio de alimentos y utilizar siempre platos y utensilios reutilizables, junto con ingredientes locales y de temporada. La creación de un espacio exterior sostenible requiere no solo planificación y diseño inteligente, sino también, y sobre todo, decisiones conscientes.